Los cuerpos sin vida de 25 civiles han sido recobrados por el momento de los escenarios de sendos ataques con misiles de crucero rusos que la madrugada del viernes alcanzaron zonas residenciales en las ciudades de Umán y Dnipró, en el centro y este de Ucrania.
Se trata del mayor ataque ruso en meses contra ciudades ucranianas que no están situadas en el frente o sus inmediaciones, aunque Kiev también fue alcanzada por algunos proyectiles.
El Ministerio de Defensa de Rusia aseguró que el bombardeo iba dirigido contra objetivos militares, antes de la esperada contraofensiva ucraniana, que se encuentra ya en la última fase de preparación.
“Las fuerzas aeroespaciales rusas lanzaron una salva de misiles con armas de alta precisión y largo alcance contra puntos de despliegue provisionales de las unidades de reserva de las Fuerzas Armadas ucranianas”, afirmó el portavoz castrense, teniente general Ígor Konashénkov, en su parte bélico diario.
El departamento que dirige Serguéi Shoigú agregó que todos los objetivos del lanzamiento fueron “alcanzados”.
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