Gracias por asomarse a la Ventana…
El gobierno se ufana de haber logrado evitar, por ahora, el castigo arancelario estadunidense a nuestras exportaciones, a cambio de aceptar las demandas del presidente Trump, quien nos embistió para sacar ventaja política en busca de su reelección, que es su objetivo prioritario…
México queda obligado al trabajo sucio de retener y mantener a todos los migrantes que expulse Estados Unidos…
México tiene un plazo perentorio para acatar esas condiciones, de lo contrario, sí se aplicará la penalización a nuestras exportaciones…
Mientras, Trump nos vuelve a acosar: “Hemos completado la firma de otro importante acuerdo de seguridad e inmigración con México, el cual será revelado en un futuro no muy distante y va a necesitar el voto de su cuerpo legislativo”…
Si las cosas son como este mensaje hace suponer, México habrá de modificar sus leyes migratorias de acuerdo con las exigencias de Estados Unidos, lo cual no haría sino confirmar lo inevitable de la interminable dependencia y lo contundente de la imposición…
Con lo que sabemos hasta ahora, todo indica que nos vamos a convertir en un territorio de asilo regional; en el muro que Trump tanto desea…
¿Entonces cómo es que el canciller Marcelo Ebrard nos dice que México regresó de Washington con la “dignidad intacta”?