Los 650 migrantes centroamericanos, que permanecían en el albergue instalado en el estadio Jesús Martínez «Palillo», en la alcaldía Iztacalco, no se quedarán en la Casa del Peregrino junto a la Basílica de Guadalupe.
Esta mañana, los centroamericanos fueron trasladados del estadio en camiones del Sistema M1. Sin embargo, en el lugar destinado para recibirlos el espacio no fue suficiente.
De acuerdo con el padre Alejandro Solalinde, hubo falta de coordinación de las autoridades capitalinas para determinar cuántas personas cabían en la Casa del Peregrino, ubicada en la la calzada San Juan de Aragón, alcaldía Gustavo A. Madero.
“Ya se habían acomodado, ya estaban formados. Vienen cargando sus cosas, les tuvimos que decir: saben qué, aquí no es, vamos a tenernos que ir a otro lado”, comentó.
Reconoció la comprensión de los migrantes centroamericanos, quienes se “comportaron muy maduros ante la noticia y recogieron sus cositas para salir de nuevo a los autobuses”.
Los migrantes fueron llevados a la Casa del Peregrino San Lorenzo, propiedad de la Basílica de Guadalupe.
Este terreno se ubica en el callejón San Lorenzo 9, avenida Tepeyac Insurgentes, en esta misma demarcación.
Fuente: Milenio