Tras más de cinco horas de discusión, con 24 votos a favor de Morena y aliados y 10 en contra de la oposición, el Senado de la República aprobó en comisiones, la reforma constitucional que establece la supremacía de la Carta Magna y deja claro que no proceden amparos, controversias, ningún otro recurso jurídico en contra de modificaciones o adicione a esa que es la ley suprema en el país.
El dictamen aprobado incluyó suprimir de la iniciativa presentada un día antes por el coordinador de Morena, Adán Augusto López Hernández, las propuestas que más polémica causaron, entre ellas la retroactividad de los nuevos ordenamientos, que implicaba que todos los recursos presentados contra la reforma judicial quedaban suspendidos. Se turnará a la mesa directiva y se votará en la sesión de mañana jueves, durante una sesión vespertina.
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Al inicio de la discusión, el coordinador López Hernández, quien sostuvo un ríspido debate con el panista Marko Cortés y ante los reclamos de legisladores de PAN y PRI, aseguró que no habrá fast track y que la reforma se aprobaría el martes.
Sin embargo, horas después rectificó y dijo que hay una petición del PVEM, a la que se sumó el PRI para que se vote en el pleno mañana mismo. El líder del Partido Acción Nacional (PAN) Marko Cortés insiste en que los cambios al dictamen son insuficientes y advirtió que tendrán efectos retroactivos graves.