Los manifestantes describieron su movilización como un «campamento en solidaridad con Palestina», uniéndose así a las múltiples manifestaciones de este tipo en Europa y Estados Unidos, así como la UNAM en México.
El viernes por la noche decenas de personas instalaron tiendas de campaña en varios lugares del campus, y colocaron bancos frente a la biblioteca que contiene el «Libro de Kells», famoso manuscrito medieval que los turistas visitan con frecuencia en la capital irlandesa.
El presidente del sindicato estudiantil de la universidad, Laszlo Molnarfi, dijo en la cadena RTE que los manifestantes piden que la institución corte sus vínculos con Israel.
Un campamento no autorizado de BDS (movimiento que pide el boicot de Israel) está presente en Trinity», indicó el establecimiento en un comunicado.
«Para garantizar la seguridad, el acceso al campus estará restringido a estudiantes, personal, residentes y miembros del departamento de deportes», añadió, y advirtió que el ingreso de visitantes estaría prohibido este sábado.
Aunque Trinity apoya el derecho de los estudiantes a realizar manifestaciones, éstas deben celebrarse en el marco de las normas de la universidad», destacó el establecimiento.
La oposición a la intervención militar de Israel en Gaza es muy fuerte en Irlanda, donde las marchas que pedían un alto el fuego han reunido a miles de personas en la calle.
El propio gobierno es muy crítico con la actitud del gobierno israelí dirigido por Benjamin Netanyahu desde el inicio del conflicto, desencadenado tras el sangriento ataque de Hamás en Israel el 7 de octubre.
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