Un nuevo acto de violencia armada en Estados Unidos se desató en un centro comercial de Miami-Dade la madrugada del sábado, cuando una pelea entre clientes desencadenó un tiroteo que cobró la vida de dos personas, incluido un hombre armado, y dejó a siete personas heridas.
Según informes de la policía, la disputa entre clientes en un establecimiento dentro de CityPlace Doral llevó a la intervención de un guardia de seguridad. En medio de la confrontación, uno de los clientes desenfundó un arma repentinamente y disparó al oficial de seguridad, resultando en su fallecimiento.
En respuesta al ataque, el equipo de seguridad del establecimiento respondió abriendo fuego contra el sospechoso, lo que resultó en su muerte en el lugar. Sin embargo, durante el intercambio de disparos, seis personas más resultaron heridas: dos mujeres y cuatro hombres. Además, un oficial de la Policía de Doral recibió un disparo en la pierna durante el enfrentamiento.
En una conferencia de prensa realizada justo antes de las 8:00 de la mañana (local), las autoridades confirmaron que dos de los heridos estaban en estado grave y fueron trasladados a Jackson Trauma y HCA Kendall Regional Trauma respectivamente. Los otros cuatro heridos se encontraban en condición estable, aunque aún no se ha confirmado si también fueron llevados a centros médicos.
El oficial de policía herido fue elogiado por su rápida respuesta y profesionalismo durante el incidente. Había sido miembro de la fuerza durante cuatro años y aplicó un torniquete a sí mismo después de recibir el disparo en la pierna. La policía también destacó que el establecimiento había recibido capacitación en respuesta a situaciones de causalidad masiva exactamente un año antes del trágico suceso, lo que ayudó a coordinar una respuesta eficiente durante el tiroteo.
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