Más de 100 mil gendarmes y agentes de policía han sido desplegados por toda Francia para encargarse de la seguridad de este sábado y de mañana domingo en el que miles de franceses saldrán a ver en pantallas gigantes la final del mundial que la selección francesa disputará contra la de Croacia.
El Día Nacional de Francia resultó algo fallido.
Dos incidentes empañaron el desfile militar de la Avenida de los Campos Elíseos de París, que encabezó el presidente galo, Emmanuel Macron.
El primero de ellos lo protagonizaron dos motociclistas de la Guardia Republicana, quienes se vieron envueltos en un choque ante la tribuna de invitados que presidía Macron.
Pese al error, el mandatario galo se mostró contento y aplaudió durante las maniobras.
Poco después, la Patrulla de Francia, un grupo acrobático del ejército, se equivocó al dibujar sobre el cielo parisino una de las franjas azules de la bandera del país con el color erróneo.
En el desfile, organizado en el día que se conmemora la toma de la prisión de la Bastilla en la Revolución francesa de 1789, participaron 4 mil 290 militares, 220 vehículos, 250 caballos, 64 aviones y 30 helicópteros.
El evento encabeza las celebraciones del 14 de julio que esta noche tendrán uno de sus momentos culminantes con un espectáculo de fuegos artificiales en la Torre Eiffel.
La jornada está marcada además por el segundo aniversario del atentado del puerto de Niza de 2016 cuando un hombre manejando un camión de carga atropelló mortalmente a 86 personas e hirió a varias decenas más.
El primer ministro francés, Edouard Philippe, asistió a las ceremonias para honrar a las víctimas del ataque.
Un operativo sin precedentes de 110 mil gendarmes y agentes de policía ha sido desplegado por toda Francia para encargarse de la seguridad de este sábado y de mañana domingo en el que miles de franceses saldrán a ver en pantallas gigantes la final del mundial que la selección francesa disputará contra la de Croacia.
Fuente: Excélsior