Quizá Juan Gabriel no habría sido alguien en la música sin la cantante sinaloense Lola Beltrán. La cantante vernácula lo conoció a mediados de los años 60 y le dio dinero para poder seguir adelante.
La relación entre Lola la Grande y Juanga nunca se acabó. Ella le grabó varias canciones de él, como “Se me olvidó otra vez”, “Esta noche voy a verla” y “Me gusta estar contigo así”.
Otra figura de la canción mexicana amiga del michoacano fue Lucha Villa. En la segunda mitad de los 70 recibió temas como “Inocente pobre amiga” y “Te voy a olvidar”. Una década después sacó un disco totalmente con canciones del cantautor y se convirtió en el más vendido de su carrera.
Ana Gabriel, Isabel Pantoja y Estela Núñez son otras que han cantado sus composiciones, editándose un disco titulado El divo y sus divas.
Pero fue Rocío Dúrcal la máxima exponente musical del creativo. Era 1977 y la española se abría camino en el mercado nacional. Ella decide grabar un disco con composiciones de él y cimbra al mercado en ventas.
La relación se extendería por otra decena de producciones y la amistad también, a grado tal que Rocío llegó a confesar intercambio de cartas y llamadas telefónicas para hablar de algo más que el trabajo. En 1984 el disco Canta a Juan Gabriel Volúmen 6 (que hasta la fecha registra más de 10 millones de copias vendidas en el orbe), alcanza nominación al Grammy. Del álbum destacan los temas “Déjame vivir” y “Te quiero mucho, mucho”, a dúo con Juanga.
Años después, por un conflicto de disqueras se separan creativamente, pero a mediados de los 90 vuelven a unirse para grabar Juntos otra vez, cuya gira promocional se ve afectada por un alejamiento repentino. Nunca se supo oficialmente el motivo, pero en el libro Juan Gabriel y yo, el ex abogado del músico afirmó que se debió a una presunta infidelidad entre el divo y el esposo de Dúrcal.
Fuente: Debate