Ventana

Duarte y Borge; el queso y la ratonera

La ira de los “dioses” arrepentidos arremete contra dos gobernadores de mala entraña, protagonistas estelares de la debacle priista del pasado 5 de junio.

Los mandatarios de Veracruz y Quintana Roo parecen gemelos. Si ya eran “risueños”, ahora les hacen más cosquillas.

Embriagados con el aroma del poder, topan con pared en la recta final de sus administraciones. Quedaron huérfanos de padrinos que hicieron la vista gorda mientras ambos saquearon sin pudor los tesoros de sus estados.

Para prevenir consecuencias, Javier Duarte y Roberto Borge pretendieron blindar fechorías usando a sus respectivos Congresos para nombrar magistrados “guardaespaldas” y fiscales anticorrupción “a modo”.

Todo iba bien hasta que salió mal.

La PGR ha presentado ante la Suprema Corte de Justicia una acción de inconstitucionalidad contra los Congresos y gobernadores de Veracruz y Quintana Roo por las reformas aprobadas en materia de combate a la corrupción sin tener facultades para ello, explicó Salvador Sandoval Silva, subprocurador Jurídico y de Asuntos Internacionales de la PGR.

 

¿La acción es para calmar la animadversión ciudadana contra la corrupción?; ¿para que el PRI-Gobierno no caiga más bajo en el ánimo popular?; ¿es estrategia concertada para no perder más poder?

 

A la acción del Ejecutivo sume la intervención del Sistema de Administración Tributaria (SAT) en Veracruz. El supremo ente fiscalizador, que todo ve y sabe, va tras tres tristes “tigres” cómplices del gobernador Duarte, y 34 contribuyentes socios-sucios de empresas “chuecas”, sin empleados ni domicilios, “cobrones” de facturas por 645 millones de pesos pagadas por la administración estatal entre 2012 y 2014. Los rateros disfrazados de funcionarios constituyeron empresas de “papel”, registradas como proveedoras del gobierno.

Según el portal Animalpolitico.com fueron 73 contratos vía adjudicaciones directas o licitaciones cerradas para la compra de productos que debieron distribuirse entre la población vulnerable, de lo cual no quedó más huella que la de los nuevos vulnerables: Duarte y su “banda jarocha”, incluidos 21 notarios-corredores.

El mugrerío del fraude veracruzano podría ascender a 3 mil millones de pesos, centavitos más o menos. El desfalco es de tal magnitud que el escándalo no habrá de acabar sólo en consignar chivos expiatorios, personas físicas o (in)morales; sería majadero.

EL MONJE REFRANERO: Duarte y Borge no quieren más queso, sino salir de la ratonera.

Compartir:
José Cárdenas

Compartir
Publicado por
José Cárdenas

Entradas recientes

Operación Frontera Norte suma mil 748 detenidos

Desde su inicio el 5 de febrero de 2025, la Operación Frontera Norte ha permitido…

1 mes hace

Trump impondrá aranceles a países que compren petróleo a Venezuela

El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció que impondrá un arancel del 25% a…

1 mes hace

Rancho Izaguirre no era campo de exterminio, según Harfuch

El rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, fue identificado como un centro de entrenamiento del…

1 mes hace

El “talón de Aquiles” de Teuchitlán es Gertz: José Buendía Hegewisch

José Buendía Hegewisch     El mayor “talón de Aquiles” de Teuchitlán para la Presidencia…

1 mes hace

Baja la inflación en México

La inflación en México se desaceleró en la primera quincena de marzo de 2025, ubicándose…

1 mes hace

Mark Carney pide disolver parlamento y elecciones anticipadas en Canadá

El primer ministro canadiense, Mark Carney, solicitó a la gobernadora general del país y que ejerce las…

1 mes hace