La Fundación Mundo Marino denunció el hallazgo de 23 delfines muertos y varados en la costa atlántica argentina, con marcas de redes en sus hocicos.
El caso generó una nueva polémica en el país sudamericano, donde se investiga el caso de un delfín que murió el mes pasado luego de ser atrapado por turistas que lo usaron para sacarse fotografías o “selfis” en la playa.
Sergio Morón, biólogo miembro de la organización ambiental, explicó que el pasado jueves encontró a los 23 delfines franciscanos varados en seis playas que son concurridos destinos vacacionales.
Agregó que están investigando el motivo de la extraña y masiva muerte, ya que la pesca artesanal no suele ser mortal para este tipo de animales, que podrían estar en riesgo de extinción si no se ponen en marcha programas de protección.
Sin embargo, explicó que cuando estos animales caen en las redes de pesca es difícil que puedan escapar, lo que les impide salir a respirar a la superficie y los vuelve muy vulnerables.
Fuente: La Razón