La Policía Metropolitana Scotland Yard redoblará a partir de hoy el número de uniformados armados que vigilan las calles de la capital, una decisión que fue tomada tras los ataques terroristas del 13 de noviembre en París.
Los famosos “bobbies” ingleses, la policía que no porta armas, será reforzada con un mayor número de efectivos armados.
El jefe de la policía Scotland Yard, Bernard Hogan-Howe, anunció que el “número será incrementado significativamente” a partir de este día y en los próximos meses, pero se negó a dar cifras exactas.
Sin embargo, el 93 por ciento de la policía permanecerá desarmada y agregó que “nuestra mejor defensa” es la información de inteligencia ya que “debes detener (a los terroristas) antes de que te ataquen”.
En una serie de medidas, Scotland Yard informó que invertirá más recursos para armar y entrenar a una fuerza policial especial compuesta por 400 uniformados que podrán hacer redadas en instalaciones sospechosas de albergar armas de fuego.
Fuente: Excélsior