El gigante automotor alemán Volkswagen admitió hoy que manipuló software de coches para cumplir en apariencia con las normas ambientales de Estados Unidos.
«Efectivamente hubo manipulación del software empleado», dijo un portavoz de la compañía.
El presidente ejecutivo de Volkswagen, Martin Winterkorn, pidió poco antes disculpas por el escándalo, pero sin confirmar los cargos elevados por las autoridades estadounidenses.
«Lamento profundamente que hayamos defraudado la confianza de nuestros clientes y a la opinión pública», señaló el máximo directivo en un comunicado emitido en la sede de Wolfsburgo. «Los acontecimientos tienen la más alta prioridad para la junta directiva y para mí personalmente», aseguró.
La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) acusó a Volkswagen de haber colocado en sus vehículos un software para eludir estándares ambientales y ordenó llamar a revisión a casi medio millón de autos de motor diesel en California.
Volkswagen encargó una investigación externa del caso. «Hay una cosa que está clara: Volkswagen no tolera violaciones de reglas o leyes de ninguna índole», sostuvo Winterkorn y prometió que la empresa realizará todos los esfuerzos posibles por recuperar la confianza perdida.
Volkswagen podría enfrentar elevadas multas y demandas civiles si se demuestran las acusaciones que afectan a unos 482 mil de las marcas Volkswagen y Audi vendidos en Estados Unidos desde 2009.
Fuente: La Jornada